Comunidad internacional en alerta por minería en Crucitas

Redacción, (elpais.cr) - Dos organizaciones ecologistas de Nicaragua llamaron la atención sobre el peligro que representa el proyecto de minería a cielo abierto Crucitas, en Cutris de San Carlos, a unos tres kilómetros del fronterizo río San Juan.

La Comisión Nacional de Desarrollo Sostenible de la Cuenca del Lago Cocibolca y Río San Juan y la alianza Nicaragüense de Cooperación para el Aprovechamiento y Protección de los Recursos Hídricos, advirtieron del peligro de ese proyecto minero de oro a cielo abierto.

Ambas organizaciones señalaron "nuestro rechazo público" a la aprobación del Proyecto Minero Las Crucitas y la emisión de Declaratoria de Interés Público y Conveniencia Nacional de dicho proyecto.

Aseguraron que ese proyecto de la transnacional Infinito Gold (subsidiaria de la canadiense Vanessa Ventures), atenta con los compromisos de conservación de la biodiversidad adquiridos por los gobiernos, como lo es el Corredor Biológico Mesoamericano.

Asimismo, las organizaciones nicaragüenses demandan "se respete la posición de Nicaragua en que se suspenda las operaciones de esta empresa minera, tomando en cuenta que los impactos ambientales no tienen fronteras y que la cuenca del Río San Juan es transfronteriza, siendo estrictamente necesarias las regulaciones del gobierno nicaragüense".

Alertaron también "a la comunidad internacional y donantes de Nicaragua y Costa Rica sobre el peligro real que representa para la biodiversidad y el recurso hídrico de la gran cuenca del río San Juan y la fijación de carbono para el planeta".

El proyecto Crucitas, que impulsa la transnacional canadiense para explotar más de 200 hectáreas, la mayoría de ellas de bosque que sería devastado, se encuentra suspendido mientras la Sala IV resuelve un recurso de amparo contra un decreto del presidente Oscar Arias, que había autorizado arrasar con la zona.

Antecedentes

El gobierno de Costa Rica ha otorgado a Industrias Infinito S.A., la Concesión de Explotación Minera, a través del Ministerio de Energía y Minas mediante la resolución Nº 217 del día 21 de abril de año 2008.

Asimismo, entregó la Viabilidad Ambiental, a través de Secretaría Técnica Nacional Ambiental (SETENA) mediante resolución Nº 3638-2005-SETENA del día 12 de diciembre de 2005, Posteriormente, SETENA aprobó modificaciones al Proyecto mediante resolución Nº 170-2008-SETENA del día 4 de febrero del 2008.

Además, el gobierno de Costa Rica levantó la moratoria a la minería que estaba vigente desde 2002 mediante un decreto firmado el 23 de abril por el presidente Oscar Arias y el ministro de Ambiente, Roberto Dobles, y en su lugar estableció requisitos que considera son suficientes para garantizar el uso sostenible de los suelos y la protección del medio ambiente.

Por otro lado, el gobierno de Costa Rica ha emitido Declaratoria de Interés Público y Conveniencia Nacional del Proyecto minero Crucitas, mediante decreto ejecutivo Nº 34801-MINAET del día 13 de octubre del dos mil ocho y publicado en la Gaceta # 201 del 17 de Octubre de 2008.

Región

El proyecto minero está ubicado a menos de tres kilómetros del río San Juan, por lo que se inscribe dentro de los corredores biológicos fronterizos El Castillo - San Juan - La Selva, en el corazón de las Reservas de la Biosfera Río San Juan - Nicaragua y la Biosfera Agua y Paz en Costa Rica.

Los gobiernos de las repúblicas de Nicaragua y Costa Rica suscribieron el 14 de marzo del 2008 el acta de la VI Reunión de la Comisión Binacional Nicaragua - Costa Rica sobre Medio Ambiente y Desarrollo Turístico de las zonas fronterizas.

Dicha acta deja clara la voluntad política de ambos países de fortalecer y desarrollar mecanismos para el establecimiento y funcionamiento de corredores biológicos entre las Reservas de Biosferas de las zonas fronterizas de ambos países, para el mejoramiento de la calidad de vida de las poblaciones ubicadas en dichas zonas.

Además, los diputados centroamericanos en su reunión en Antigua, Guatemala, el 28 de marzo del 2008, han declarado velar por el cumplimiento de que sus Estados reduzcan sus emisiones y conserven e incrementen la cobertura forestal.

Los legisladores también se han comprometido para velar por la preservación permanente de la biodiversidad y el fortalecimiento de las instituciones responsables de la gestión forestal sustentable.

Por otra parte, las entidades públicas y privadas organizadas en las áreas fronterizas, suscribieron la Carta de los Ríos el 17 de abril del 2008, en la que se demanda y se recomienda a las autoridades de Nicaragua y Costa Rica que se promuevan actividades productivas, coherentes con el desarrollo sostenible en el territorio fronterizo.

El pronunciamiento pidió prohibir actividades altamente degradantes a nivel ambiental y social, en particular la expansión de los monocultivos y de la minería a cielo abierto.

Llamado

"Estamos convencidos de que para mantener la armonía, la paz, y la convivencia de los territorios fronterizos, los Estados deben hacer uso del principio precautorio en materia ambiental y asegurar que las actividades dentro de sus jurisdicciones no causen daños a su diversidad biológica, tal y como lo ordenan varios convenios, entre ello, el Convenio Centroamericano de Biodiversidad, firmado por los presidentes centroamericanos en el año de 1992", precisaron las dos organizaciones nicaragüenses.

Aseguraron que la minería a cielo abierto de metales provoca impactos ambientales tales como: la destrucción de bosques, destrucción de la cubierta vegetal y las estructuras del suelo, degradación de suelos con el consecuente aumento de la sedimentación en los ríos.

Explicaron que la minería de oro a cielo abierto tiene una demanda excesiva de agua que luego sale del proyecto como agua contaminada con químicos, contaminación de aire, destrucción del paisaje, amenazas a la salud humana por las condiciones laborales en una mina de este tipo, amenaza a las fuentes superficiales o subterráneas de agua por el excesivo movimiento de capas del terreno y por el uso de sustancias altamente contaminantes.

Resaltaron que la actividad de minería a cielo abierto, afectaría el curso de agua y poblaciones circundantes ubicadas en el Río San Juan.

Eso sería causado por los eventuales procesos de sedimentación que incidirán negativamente en estos ecosistemas y su biodiversidad, en la calidad de sus aguas, en la navegación, la salud de estas comunidades, la calidad paisajística y el potencial turístico de esta zona.

Recodaron que el III Foro de la Cuenca del lago Cocibolca y el río San Juan condena las acciones del gobierno de Costa Rica para favorecer y autorizar las operaciones de la mina a cielo abierto en las Crucitas.

Además de condenar este hecho, el Foro se pronunció y recomendó a la Comisión de Desarrollo Sostenible de esta Cuenca 69, atender esta temática como tarea prioritaria y proponer soluciones a este problema.

Tras hacer un llamado a la comunidad regional para movilizarse contra ese proyecto de minería, alertaron a la comunidad internacional y donantes de Nicaragua y Costa Rica sobre el peligro real que representa para la biodiversidad y el recurso hídrico de la gran cuenca del río San Juan y la fijación de carbono para el planeta, el inicio y desarrollo del proyecto minero Crucitas, que pretende llevar adelante la empresa Industrias Infinito, subsidiaria de la canadiense Infinito Gold Limited, en Cutris de San Carlos, Costa Rica.

Finalmente, denunciaron lo que llaman incoherencia y doble discurso del gobierno de Costa Rica que por una parte suscribe convenios y acuerdos centroamericanos en materia de conservación de la biodiversidad y el medio ambiente, y por otro lado otorga licencias y concesiones de actividades de empresas transnacionales que destruyen la naturaleza que este gobierno dice proteger.